jueves, 15 de enero de 2009

Fábula de Management Zen

"Conference call" de aprobación de proyecto. En la sala, tenso, el equipo español que lo propone. Al otro lado del teléfono, desperdigados por el mundo, una decena de guiris que deben aprobarlo.

Se conecta el CEO: "me he leído el material enviado, entiendo que los demás son profesionales y también lo han hecho". Silencio (glups, pero si nadie se lo suele leer por adelantado).

Nada más empezar la introducción, interrumpe: "Esto está muy bien, pero ¿podemos saltar directamente a las preguntas?". Silencio (anda, iba en serio).

"¿Alguien tiene una pregunta? Yo tengo cinco". Silencio (uf, ¿qué pregunta hago que resulte inteligente?).

Cinco minutos antes del final de la media hora prevista: "Muy bien, gracias, caballeros, adelante. ¿Alguien sabe si la siguiente call que tengo ahora es en este número?". Silencio (¿realmente hemos acabado antes de la hora?)

Si está desarrollando un "personal brand", desde luego han sido venticinco minutos ilustrativos.
La próxima vez, seguro que el material se lo ha leído todo el mundo.

4 comentarios:

solarsister dijo...

Guau! Menuda apisonadora...

Justo dijo...

Lo que invita a la reflexión de esta transacción es que, habiendo CEOs de por medio, nos sorprenda tanto que alguien haya hecho los deberes (el propio CEO en este caso) y que las cosas ocurran según lo previsto (acabar en el tiempo planificado).

Me parece a mi que seguimos siendo muy españoles los españoles.

Justo

Marisa E dijo...

Si si los españoles muy españoles y los guiris muuuuy guiris.

Que situación de sorpresa y estupefacción!!!!

Veamos esto de la sorpresa: si algo hay que destacar es que la capacidad de sorprender es un privilegio reservado a pocos. El susodicho CEO la tiene!!

Y aplicándolo a uno mismo: es genial comprobar que todavía tienes la capacidad de sorprenderte a ti mismo, hace que te preguntes que otras cosas puedes hacer que ya habías olvidado. Vamos a aplicarlo

Ignatius dijo...

Cuando escucho algunas preguntas "interesantes" en según que conference calls... pienso que nunca llegaré a nada en esta vida... ;-)
(al menos no llegaré al mismo sitio)